Moralo: César Carrasco, Dani, Arellano, Asiel, Toribio, Manu, Emilio Gil (Tortu, 87'), Pintado, Juanjo, Miguelín (Fran Gómez, 80') y Alex (Villa, 61').
Árbitro: Pérez Ramos, de la delegación de Plasencia. Regular. Expulsó, por doble cartulina amarilla, al local Mané (15'). Además mostró tarjeta de ese mismo color a sus compañeros Checho, Kiko, Ramiro y Miguel Ángel; y a los visitantes Toribio, Manu, Pintado y Emilio Gil.
Goles: 0-1 Pintado (44'). 0-2 Emilio Gil (83'). 0-3 Manu (90'+3).
Incidencias: Algo más de un centenar de espectadores en el Municipal de Miajadas, con buena presencia de aficionados moralos, en tarde agradable aunque con algo de viento que favoreció a los de Navalmoral en la primera mitad. Rectángulo de juego en aceptables condiciones. El Moralo jugó completamente de verde, cambiando su habitual calzón blanco para no coincidir con el del Miajadas.
Comentario: Baño de confianza del equipo de Navalmoral en su primer triunfo fuera de casa. Los verdes acumulaban dos derrotas consecutivas y necesitaban reivindicarse lejos de su campo para recobrar el ánimo y la ilusión por ocupar un puesto en la zona alta de la clasificación. El Miajadas, con una plantilla experimentada, acusó el mazazo de jugar desde el minuto 15 con un futbolista menos por la ingenua y justa expulsión por doble amarilla del defensa Mané. El Moralo lo aprovechó a la perfección y, aunque le costó abrir el marcador, fue merecedor incluso de algún gol más. A pesar de ello lo que verdaderamente importa son los 3 puntos, que además van dedicados al capitán Oliver, lesionado de gravedad y que estará en principio un par de meses fuera de los campos.
Carlos Sánchez, en cierta manera, revolucionó el once inicial en busca de dar un golpe para la reacción. Reapareció en el centro de la defensa Arellano, puso más adelantado a Manu para que junto a Pintado rodearan a Emilio Gil, y colocó en punta por primera vez de inicio a Alex. El resultado fue que el equipo estuvo más dinámico en el centro del campo para presionar al rival y circular el balón en el intento de favorecer la velocidad en ataque. Además, la merecida expulsión de un contrario al cuarto de hora le ayudó para encontrarse más cómodo sobre el terreno de juego y tener controlado en todo momento el encuentro. El cancerbero César Carrasco apenas tuvo que intervenir para despejar algunas llegadas locales.
El primer tanto llegó poco antes del descanso. Alex disparó a puerta tras presionar y provocar la duda a la zaga local con su portero y Pintado remachó a puerta vacía. El 0-1 dio mucha más tranquilidad y confianza a los verdes para encarar la segunda parte.
Aunque el Miajadas tuvo el aire a favor tras el intermedio, y también la iniciativa que le cedió el Moralo durante buena parte de los minutos, el portal del cuadro de Navalmoral no pasó por verdaderos apuros en ningún momento. Los de Carlos Sánchez jugaron con calma, sin arriesgar demasiado y esperando el desgaste de los tomateros. El segundo gol, ya en la recta final del choque, lo marcó Emilio Gil con la cabeza después de que el guardameta miajadeño rechazase la trayectoria del penalti que tiró por la clara falta que sufrió Juanjo dentro del área. Y el tercero, que sentenció el duelo en el descuento, lo anotó Manu también de cabeza tras un golpe franco botado por Toribio.
Triunfo importante para mantener activo el empeño de agarrarse a las plazas de mitad de la tabla hacia arriba. Con este goleada fuera de casa, manteniendo además la portería propia sin recibir ningún tanto, el equipo verde sigue mirando al cuarteto de cabeza aunque sin descuidar la atención con quienes les siguen porque la igualdad es tremenda después de las diez primeras jornadas. Por ahora, la media de 15 puntos por cada 10 partidos está más que fenomenal.
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